El Departamento de Educación aun no ha divulgado ninguna medida preventiva sólida, para evitar que las cientos de adolescentes embarazadas en las escuelas públicas del País se contagien con el virus del Zika tan pronto como el próximo inicio escolar en agosto. Durante el periodo de verano, muchas escuelas se han vuelto criaderos de mosquitos, aumentando el riesgo de contagio en la población estudiantil y los trabajadores. Lo que podría convertir muchas escuelas en focos de infección. El uniforme tradicional femenino suele dejar muchas partes vulnerables a la picaduras de los mosquitos y condiciones poco favorables se vuelve casi inevitable la transmisión del Zika por medio de estos. Muchos salones no están habilitados y el peligro para estas adolescentes es serio.
Aunque las jóvenes embarazadas no son las únicas en riesgo, deberían representar una prioridad para el sistema educativo del País y al menos proveerle repelentes y establecer un plan de emergencia si no deseamos pagar las consecuencias futuras, con los bebés.
El virus del Zika se ha relacionado a la microcefalia en los neonatos y a otras condiciones de salud severas en adultos mayores. Aun estamos a tiempo para establecer un plan preventivo efectivo que minimice las posibilidades de una epidemia de lamentables magnitudes que se desate en nuestros centros escolares.
Por medio de este comunicado se emplaza al Secretario de Educación y a las autoridades pertinentes a que se tomen medidas preventivas en el asunto para evitar una epidemia descontrolada al principio de semestre.
Con respeto y las mejores intenciones,
José Israel Negrón Cruz
12 de julio del 2016
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