Los padres los hacen,
las calles los crían;
la misma
historia,
día tras día.
Muerte y tristeza para algunos,
para otra vida
y otra alegría.
Cada cual carga su cruz,
sin reglas de igualdad,
no existe la justicia en esta realidad.
Entre los jóvenes corre el “capeo” de un respeto.
Están dispuestos a darle uno o dos tiros a cualquiera
,
cambiando de humanos a fieras.
Creyéndose mas hombres,
por tener algo que les pesa en la cintura.
Así están las cosas, así es mi cultura.
Ya no hay respeto a los oficiales,
se tiran con la perrera,
agarran uno que otro “tecato”,
mientras suenan los metales.
La mitad de los detenidos al rato los sueltan,
y al otro día, las ventas siguen iguales.
De vez en cuando las vacas locas se tiran
y se roban el muerto,
por no estar despiertos.
Baja la cantidad de material por bolsa,
por el “trambo” de los puercos,
el Punto se arisca,
por la baja de las ventas,
no les queda más remedio
y con la “compe” inventan.
Pal de tiros pa’ espantar la clientela,
se “chotea de donde salió la envidia
y hay que ponerse en vela.
Montando la guardia en los techos,
para cuando vengan los enemigos,
traspasarles con el AK47 el pecho.
Vuelan los sesos, corre la sangre,
muchos son emboscados,
montados en el baúl de un auto
y tirados en un mangle.
Todo el mundo lo ve, nadie dice nada.
Los conciertos y las discotecas;
dos de los más “deleitadores” abismos,
Con el propósito de pasar un rato “fine”
Buscando el bailoteo con las gatas,
activar el “cure-time”.
Marihuana entre el público y los raperos.
No faltan las peleas y los revolúes,
de los “mamabichos “que siempre se lucen.
Las chamaquitas caen embarazadas,
unas por experimental,
otras porque querían
sentirse amadas.
Muchas veces los novios las abandonan,
o en las
guerras de la calle mueren.
Algunas eligen el camino corto
y recurren al
aborto.
Es que ninguna ha llegado a ver,
que lo que lleva en el vientre es una vida,
que merece nacer.
Pa’ colmo de males,
tenemos un Gobernador,
que se caracteriza, por hablador.
Mandando a Puerto Rico al infierno,
y quien únicos se salvan son los ricos
y los allegados a su gobierno.
El personaje ya
ha causado varias situaciones negativas;
vende la Telefónica,
a costo de sangre,
despidos y hambre.
Despidiendo la clase obrera,
que paga
contribuciones,
re invadiendo caseríos,
y la área de
Santurce,
haciendo horripilantes construcciones,
pa’ un supuesto Tren Urbano.
Pone a brutos a cavar por donde no es,
causando grietas e insoportables
y estorbos a la misma vez.
Después quiere hacer creer a la gente
que ha obrado al “cien”
y por encima se ve que las cosas no andan bien.
Todavía tenemos victimas de huracán George en
refugios;
¡a que eso no lo dice!
Cuando haga algo bien, que me avise.
El “face” del tren y guardias por montones,
es simplemente por las elecciones.
Así están las cosas,
después que se descojona medio mundo,
quiere taparlo todo a último momento.
Discúlpenme sus seguidores, pero así es como lo
siento.
Así están las cosas en Puerto Rico,
los derechos son pa’ los ricos,
los guardias siempre joden a los pobres;
¡no los dejan vivir!
Pero nunca he visto una redada en Garden Hill.
Y entre los ricos corre la droga,
es simplemente como dice Vico C:
“el dinero
controla cualquier puerco y hasta la corte,
tanto en el Sur como en el Norte”.
Este poema no es una fantasía,
que ronda mi mente,
es la realidad que mis ojos ven,
es la realidad que mi piel siente.
¡Así están las
cosas!
Y este servidor no miente…”Peace”.
Autor: José Israel Negrón Cruz
Escrito el 13 de abril de 1999
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Revisado el 17 de diciembre del 2014
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