Rashel

Rashel despierta con ánimo, se viste, revisa sus materiales, se despide de su madre que partirá a limpiar casas y de su padre que ya tiene las botas puestas en la pequeña sala de aquel apartamento en Barrio Obrero. Camina media hora hacia la escuela, desayuna en el comedor y llega temprano al salón. Siempre da los buenos días, se sienta en la primera fila y saca su libreta. Ama cuando analizamos poesia, interpreta personajes de obras de teatro, devora cuentos por iniciativa propia y al leer El color de mis palabras dijo: “quiero ser escritora”. El semestre pasado compartió y ayudó a sus compañeros cuando no entendían algo en lo que ella tenía habilidad de sobra. Nunca faltó sin excusa y obtuvo la calificación más alta. Hoy Donald Trump volvió al poder, se ordenaron las redadas. Cuando llegué al salón, la primera silla estaba vacía y un mensaje de texto, enviado desde un teléfono de Obama, flotaba en mi celular: “Rashel ya no asistirá debido a su estado migratorio”.

                                                                                        José Israel Negrón Cruz

                                                           14 de enero de 2025