Una vejez prematura y carácter agotado, se han apoderado de mi cuerpo.
Las horas parecen acumularse en mi espalda y las drogas comienzas a realizar
estragos en mi cerebro. Quisiera huir un poco más allá de Vermont, Vieques o la
Republica Dominicana. Pero sigo aquí con los pies firmes, en realidad con el trasero
firme en este viejo asiento la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad
de Puerto Rico en la clase más mierda y básica que todo ser humano puede tomar:
Ciencias biológicas.
Levanto
la mirada y está ella ahí, firme, con ese acento desesperante que caracteriza a
los de naturales. Y yo aquí viendo como cada día me vuelvo más mecanico y menos
poeta, más académico y menos estudioso. Como dijo la jeva después de un par de
tragos en la playa: “ la vida académica quizás te ha enriquecido mucho en
ciertas áreas, pero cabe duda de lo pobre que te haz vuelto como ser humano”.
Como en la mayoría de sus exóticos planteamientos, la jeva, no se equivocó. ¡Qué
lindo sería solo tomar aquellas clases que me gustan! Y las que no, como esta, desecharlas.
Autor: José Israel Negrón Cruz
marzo-2004
No hay comentarios.:
Publicar un comentario